Panaderos Artesanos de Tordesillas desde 1930
Panaderos Artesanos de Tordesillas desde 1930
Panadería Soto, maestros artesanos del pan desde 1930 en Tordesillas.
Tres generaciones horneando pan con alma, masa madre y tradición.
El sabor de siempre, hecho como antes, cada día.
En el corazón de Tordesillas, donde las calles aún conservan el alma de Castilla y el tiempo parece moverse al ritmo del aroma del pan recién hecho, nace la historia de Panadería Soto. Fundada en 1930, nuestra panadería no es solo un obrador, sino un verdadero testimonio de tradición, dedicación y amor por el buen pan.
Desde hace más de 90 años, nuestra familia ha horneado cada barra, hogaza y bollo con una única receta: harina de calidad, manos artesanas y el respeto por los tiempos del pan. Somos maestros artesanos del pan, orgullosos de continuar un oficio que pasa de generación en generación como un legado vivo, que no entiende de atajos ni de prisas.
Nuestra historia comienza con el abuelo Soto, un hombre de manos fuertes y corazón generoso, que encendía el horno cada madrugada antes del alba. Su fórmula era sencilla: seleccionar las mejores harinas, trabajar la masa con paciencia y dejar que el tiempo hiciera su magia. Esa misma filosofía sigue siendo la esencia de todo lo que hacemos hoy.
Tradición que alimenta
A lo largo de las décadas, Panadería Soto ha resistido a las modas y a la industrialización, manteniéndose fiel a los métodos tradicionales. Fermentaciones largas, masas madre naturales y hornos de piedra siguen siendo el centro de nuestro obrador. Creemos que el pan debe tener corteza crujiente, miga viva y sabor auténtico, porque no solo alimenta el cuerpo, también reconforta el alma.
Cada mañana, cuando abrimos las puertas, no solo ofrecemos pan. Ofrecemos memoria, oficio y comunidad. Nos emociona ver cómo los nietos de nuestros primeros clientes vuelven a casa con nuestras barras bajo el brazo, repitiendo un ritual cotidiano que ha perdurado durante generaciones.
Mucho más que pan
Aunque el pan es nuestro emblema, también elaboramos con mimo dulces tradicionales, empanadas, bollería casera y productos de temporada que acompañan las fiestas y costumbres de nuestra tierra. Cada pieza que sale de nuestro horno está hecha como si fuera para nuestra propia familia.
Panadería Soto es un lugar donde los olores hablan de infancia, donde cada miga cuenta una historia, y donde el futuro del pan sigue siendo tan sencillo y honesto como siempre lo fue.
Gracias por formar parte de esta historia.
Gracias por confiar, cada día, en nuestro pan.


